“Nosotros destacamos que el modelo cooperativo es un referente principalísimo para abordar la transición económica y social. Sin embargo, debemos destacar también la ausencia de la voluntad orgánica del movimiento de construir el poder político cooperativo capaz de liderar la transición hacia un mundo cooperativo”. J.Y.

Este domingo 22 próximo se concretará finalmente las elecciones presidenciales en Argentina que definirán quién gobernará el capitalismo argentino, por cierto, en ruina. No se ha mencionado al cooperativismo en los discursos de campaña electoral. Lo que evidencia, también, la escasa o nula incidencia política del cooperativismo hacia el sector político-partidario: Una oportuna auto-crítica constructiva.

Claro está que debemos poseer un método de análisis coyuntural que nos brinde la dirección y tendencia de los acontecimientos, puesto que los sucesos políticos, sociales y económicos no son aconteceres del azar de la vida, del libre mercado y la oferta y demanda, creer eso significa lo que bien dijo Perón “consumo de tontos”.

El infortunio del mundo está descrito en la cita “…la realidad nos escupe en la cara y nos empuja a pensar políticas de reducción de daños y nuevas formas de producción menos nocivas”.

Rememoro una frase que describe la actual calamidad socio-económica y la manera de encaminar su resolución, según Perón: “Este problema, como ya lo he dicho muchas veces, o lo arreglamos entre todos los argentinos o no lo arregla nadie”.

Sin embargo, esta frase requiere una precisión de objetivos y de método, de organización y de transformación favorable al pueblo que ya ha sufrido en demasía, entonces, la programática política debe ser convocante a una transición justa y equitativa para el pueblo, en realidad, sólo un pueblo organizado puede resolver los problemas del país.

Lo hemos afirmado y lo ratificamos aquí y ahora mismo: “La fundación de la cooperativa de los Pioneros de Rochdale (Inglaterra) implicó, entre muchos, un hito histórico, un acto profundamente contestatario al régimen capitalista porque evidenció que otro sistema económico-social más humano, es posible

Una transición hacia el sistema cooperativo.

Podemos afirmar que la política-partidaria tradicional que impulsan los referentes políticos presidenciables está totalmente desfasada y no pueden ver que la economía ortodoxa globalizada nos conduce inexorablemente a un conflicto social de proporciones global.

Nosotros destacamos que el modelo cooperativo es un referente principalísimo para abordar la transición económica y social. Sin embargo, debemos destacar también la ausencia de la voluntad orgánica del movimiento de construir el poder político cooperativo capaz de liderar la transición hacia un mundo cooperativo.

Y peor aún “Cuando algo tan básico y elemental, como comer, empieza a ser un problema para las grandes mayorías comienzan a cobrar fuerzas aquellas prácticas y discursos que cuestionan y ponen en evidencia las perversidades del sistema”.

La realidad cambiante nos ofrece ir hacia un horizonte cooperativo y salir del empantanamiento en que se encuentra la Argentina. Nosotros detectamos en el mundo una necesidad urgente: Construir una transición hacia el sistema cooperativo.

¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!